La aromaterapia se remonta al inicio mismo de la vida.
Si tenemos en cuenta que las plantas han existido, incluso, antes que el hombre podemos decir que sus beneficios y virtudes han estado esperándonos desde siempre.
Papiros que datan desde hasta 200 años AC demuestran que los antiguos ya usaban su conocimiento sobre las propiedades de muchas plantas y flores y que los egipcios ya sabían destilar esencias de las coníferas y usaban aceites esenciales (AE) para embalsamar faraones.
En otras civilizaciones antiguas, como en el caso de los fenicios, los aceites se utilizaban como expresión de concepciones cósmicas y animistas, respondiendo, de este modo, a exigencias de culto y eran asociados a encantamientos y teofanías. En el caso de la magia Wicca, las mujeres sabias utilizaban las plantas para sanar el cuerpo y el alma, para invocar espíritus superiores y en la India los usaban para acompañar la meditación.
Con el paso del tiempo y el avance de la medicina alopática, la aromaterapia quedó relegada a un puesto casi inexistente. En estos últimos años, la necesidad de volver a lo natural y a la integración de CUERPO, MENTE y ESPÍRITU, ha llevado a muchas personas a renovar la relación con las plantas a través de infusiones, aromas, aceites naturales y ungüentos como una manera de acompañar la curación tradicional de un paciente de un modo más integral.
Así, ya no se considera a la aromaterapia como una «medicina alternativa» si no, más bien, «complementaria» ya que acompaña al proceso de curación física pero, además, genera la sanación psíquica y emocional del paciente. La técnica utiliza el AE como un estabilizador y armonizador de estos tres aspectos del individuo.
Existen tres puntos para considerar respecto de la aromaterapia:
- Primero, es importante saber que, al ser natural, la sanación se vuelve un proceso más lento y que requiere de cierta disciplina por parte del usuario.
- Segundo, es fundamental que el extracto sea de calidad. Esto NO QUIERE DECIR que se pueda usar PURO sobre la piel. Hay quienes fomentan esto sin advertir al usuario que puede ser dañino si no tenemos conocimiento suficiente respecto de tiempos y frecuencia de exposición. SIEMPRE es bueno diluir el AE en un ACEITE VEHICULAR, es decir un elemento base que «transporte» las propiedades de un AE.
- Finalmente, estas esencias (en su mayoría) NO pueden ingerirse directamente, salvo los recomendados por la Escuela Francesa de Aromaterapia. Los beneficios de las plantas (siempre y cuando estemos seguros de que así sea) pueden ingresar vía oral mediante infusiones y tintas.
TIPOS DE TRATAMIENTOS Y BENEFICIOS
La aromaterapia como tratamiento para una afección tiene en cuenta un gran número de elementos como: estilo de vida, personalidad, ámbito social, familiar y laboral; alimentación, actividad física y creencias religiosas y personales entre otros, los cuales son factores determinantes para lograr un efecto positivo de los AE.
Esta disciplina acerca los beneficios mediante tres métodos que se corresponden con las tres escuelas principales en la materia:
- LA INHALACIÓN (Esc. Alemana de Aromaterapia)
Los estímulos olfativos llegan al sistema límbico del cerebro, donde se localiza la memoria y los instintos básicos (hambre, sed, sexo, supervivencia). Además, advertirnos de peligros como el humo y los gases tóxicos o venenosos, el olfato contribuye con el gusto, estimulando el apetito y las secreciones digestivas.
Se trata de una de las partes más primitivas de nuestro cerebro y ejerce una poderosa influencia en el comportamiento, aunque siempre de forma subconsciente.
- LOS MASAJES (Esc. Inglesa de Aromaterapia)
La aromaterapia también se vale del tacto, un sentido que responde a un instinto humano y a una necesidad fundamental. La cultura humana lo emplea como medio de comunicación y como expresión de afecto. El tacto es muy usado en ámbito terapéutico porque:
*Influye en el sistema nervioso autónomo, relajando y vigorizando el cuerpo.
*Fomenta la secreción de endorfinas, conocidas como “las hormonas de la felicidad”, que actúan como narcóticos naturales del cuerpo al reducir el dolor y al producir una sensación de júbilo y bienestar.
- LA INGESTIÓN (Esc. Francesa de Aromaterapia)
Este método utiliza la ingestión de ciertos óleos mediante fórmulas naturales. Es importante estar certificado por esta entidad para utilizar esta técnica.
Independientemente del método de aplicación, todos promueven la relajación al tiempo que brindan sensación de alegría o tranquilidad ya que los aromas actúan en nuestro interior por asociación de imágenes, sorteando la intervención de nuestra parte consciente que todo lo analiza racionalmente.
En definitiva, con la utilización de extractos (solos o combinados) se obtienen dos efectos: por un lado el puramente físico sobre el problema, y por el otro, una respuesta emocional frente a un determinado olor lo que, generalmente, promueve una mejora en el estado de ánimo.
Debido a esto es que en muchos casos de enfermedades crónicas la complementación con técnicas aromaterapéuticas genera una mayor recepción del tratamiento alopático por parte del paciente. Por eso, es importante que además de usar un AE por sus acciones terapéuticas se tenga en cuenta su aroma.
La aromaterapia, bien aplicada, es la forma física más sutil y natural de conectar con nuestra alma.
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